Paso 1: Recolección y Preparación de Materiales
En esta guía, exploraremos paso a paso cómo diseñar y ensamblar una estufa portátil y eficiente que funciona con alcohol isopropílico, ideal para actividades al aire libre, campamentos o uso doméstico. La clave para un rendimiento óptimo radica en la selección de materiales accesibles y en la precisión del proceso de construcción.
Para comenzar, necesitarás un frasco de enlatado resistente, un tubo de cobre delgado, una tubería para formar la bobina, un material absorbente para la mecha, arena limpia y soldadura JB para sellar todas las uniones. La elección de estos componentes asegura durabilidad, seguridad y facilidad de ensamblaje.
Paso 2: Transformar el Tubo de Cobre en una Bobina Funcional
Primero, llena completamente el tubo de cobre con arena fina y limpia, asegurando que quede bien compactada. Esto le dará rigidez y facilitará su manipulación sin deformaciones.
Luego, sella ambos extremos del tubo con tapas o telas resistentes para evitar que la arena se escape. Con ayuda de una pinza o vicio, dobla suavemente el tubo alrededor de un cilindro o tubería de diámetro adecuado, formando un bucle limpio y uniforme. Es fundamental aplicar una presión constante y cuidadosa para evitar dañar el cobre, asegurando que la bobina quede perfectamente alineada y sin deformaciones.
Tras doblar el tubo, vacía completamente la arena del interior. Para ello, enjuaga con agua tibia el tubo y déjalo escurrir hasta eliminar todos los residuos de arena. La limpieza interna garantiza un flujo de aire sin obstáculos, esencial para la combustión eficiente.
Paso 3: Marca y Ajuste de la Bobina en el Frasco
Una vez que la bobina está lista, coloca el frasco de enlatado sobre una superficie plana y marca con un rotulador la posición en la que la bobina debe ajustarse para encajar en su abertura superior. Corta las patas adicionales de la bobina para que esta quede aproximadamente a tres cuartos de la altura del frasco, asegurando una posición estable y compacta.
Este ajuste preciso es clave para evitar fugas de aire y garantizar una circulación óptima del combustible y del aire, promoviendo una combustión uniforme y eficiente.
Paso 4: Perforación y Ensamblaje de la Tapa
Con la bobina cortada a la medida, marca en la tapa del frasco los puntos donde se perforarán los agujeros. Utiliza una broca del tamaño exacto de la bobina para crear orificios precisos y ajustados. Esto facilitará la inserción de la bobina a través de la tapa, asegurando un sello hermético.
Inserta cuidadosamente la bobina en los orificios y aplica soldadura JB en los bordes superior e inferior para sellar cualquier posible fuga de aire. Permite que la soldadura se cure durante al menos una hora antes de continuar, garantizando una unión sólida y segura.
Paso 5: Instalación de la Mecha y Carga de Combustible
Introduce la mecha, preferiblemente de tela resistente y con buena capacidad de absorción, atravesando los agujeros en la bobina. Gira y empuja firmemente la mecha para que quede bien ajustada y en contacto con la superficie interna de la bobina, facilitando una combustión estable.
Luego, vierte cuidadosamente alcohol isopropílico en el frasco, asegurándote de no derramar. Coloca la tapa con la bobina en su lugar y cierra firmemente para evitar fugas. Limpia los excesos de combustible en la superficie de la bobina con un paño húmedo en alcohol para un funcionamiento limpio y eficiente.
Paso 6: Primer Encendido y Ajustes Iniciales
Para el primer encendido, calienta la bobina con una antorcha de propano, lo que vaporizará el alcohol y generará una llama constante. Mantén el calor durante unos cinco minutos, vigilando que la llama se mantenga estable y sin fluctuaciones.
Es normal que durante la primera quema aparezca un poco de humo u olor, que desaparecerá rápidamente. Si la llama no es uniforme, ajusta la cantidad de alcohol o revisa la posición de la mecha para optimizar el rendimiento. Con estos pasos, tendrás una estufa robusta, portátil y lista para su uso en diversas situaciones.
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